Emocionado tras el fallo absolutorio de la Cámara del Crimen y el Jurado Popular, el cabo imputado por la muerte de Álvaro Zarandón, Maximiliano Celi realizó breves declaraciones en la sala del recinto judicial. Dijo que con él “ya se hizo justicia, pero hay una vida que se ha perdido, hay un joven que ya no está más con nosotros y con mi abogado vamos a luchar porque se haga realmente justicia; para que el verdadero culpable esté donde tiene que estar”.
Celi, oriundo de Pueblo Italiano, de 25 años y en pareja con Valeria Cabanay, con quien tiene un hijo, había sido acusado de homicidio calificado por abuso funcional y brindó hoy su esperada declaración. En la misma negó haber efectuado algún disparo, pero aseguró haber dicho que sí lo hizo a órdenes de un superior y que otro le contó que estaban montando una escena para “salvar” a los trece efectivos implicados.
También remarcó que aceptó la imputación a instancias del mismo superior y señaló que le explicaron que ésta se hacía para salvar a un compañero, que Celi identificó a través de su testimonio en la audiencia.
Además, atestiguó que Zarandón no portaba armas al momento de efectuarse la balacera que termina con su vida y que -tanto en Río Cuarto como en Bouwer- fue coaccionado física y psicológicamente.
“Quiero disfrutar con mi familia por este año y siete meses que me la sacaron, el no ver muchas cosas de mi hijo. Me duele en el alma por Álvaro y su madre; la gente que me conoce sabe cómo soy. Su hijo ha sido quitado de sus manos por negligencia, por gente que no estaba capacitada para lo que hacía. Quiero que se haga justicia, como le dije a ella mirándola a los ojos”, añadió el policía, agradeciendo especialmente el acompañamiento de su esposa, sus padres y hermanos y algunos compañeros de trabajo, como así también al equipo de letrados y expertos que lo defendieron.
Su salida de Tribunales fue esperada por una gran cantidad de personas, entre ellas muchos efectivos policiales, vecinos y medios de prensa. La bronca contenida de los familiares de Zarandón se hizo escuchar al momento que se retiraba para recobrar la libertad.