“Necesitaba hablar de mi hijo; porque siempre se habla de la causa, de cómo pasaron las cosas y nunca de lo que está pasando en casa con sus hermanos. Fue y es un año muy duro y muy difícil para mí, porque soy madre y padre y hay que contenerlos”, dijo Sandra Zarandón, madre de Álvaro Zarandón, el joven fallecido en la madrugada del pasado 8 de febrero de 2013 en un confuso operativo policial y por cuya muerte está imputado el cabo de la Policía de la Provincia de Córdoba, Maximiliano Celi.
“Álvaro era mi hijo varón mayor, mi amigo, mi compañero, mi hermano: era todo. Un chico que estudiaba y les enseñaba a sus hermanos. Cuando él se fue, me faltó la mitad de mí. Me parece que es mentira, todavía no lo puedo asumir y lo sigo esperando”, expresó quien dialogó esta mañana con el periodista de Cadena Panamericana, Miguel Alberto Tutor, tras meses de silencio y a dos días de cumplirse el primer año del trágico suceso.
Sandra comentó que inculca a sus hijos la confianza en la policía: “Si pasa algo, corran hacia la policía. Ellos me miran y preguntan, ¿a la policía? Y yo les contesto que sí, que tienen que volver a confiar”.
“A pocos días de cumplirse el año, vivimos recordando sus últimos momentos: a la hora que se fue, cómo se fue vestido, cómo se reía… Fue un llanto toda la semana”, señaló la madre de seis hijos.
En cuanto al juicio oral y público previsto para fines de marzo o principios de abril, Zarandón manifestó: “Quiero que llegue rápido. Quiero saber la verdad, estoy desesperada. Se dicen muchas cosas, pero yo quiero la verdad. Pienso y rezo todos los días; le pido a mi hijo que me de paciencia y tranquilidad a la hora de estar cara a cara con quienes estuvieron presentes aquella noche. Es difícil que te pongan al asesino de tu hijo en frente y no reaccionar. Pero siento el apoyo de familiares y amigos que me ayudan a seguir”.
La querella de la familia Zarandón está a cargo de los doctores Matías Burgos y Sandro Aguilera, quienes convocarían a una conferencia de prensa en día y horario a confirmar.
La mujer informó que el sábado no habrá marcha en recuerdo del joven: “Será sólo un recuerdo familiar con una misa para él”.